La "Anticipación". 15/02/2015

Antes de nada, quiero expresar, en mi nombre y en el de los compañeros que nos dimos cita, a las 9:30 de la mañana en la Alameda, el pésame al amigo Eduardo y familia por el triste fallecimiento de su hermano en el día de ayer.

De nuevo un día confuso en lo que respecta a la climatología, por ello, a las 9:30, sólo cinco componentes de las 9:00 más Moncho J., Miguelito y Gabino.
Arrancamos cada grupo por su lado y pusimos rumbo al Lago de Castiñeiras, lugar que siempre se hace más divertido de ciclar pues tiene un componente de subidas, bajadas, trialeras y “enchoupadas” de barro y tierra pegajosas.
Toñito Mouco hizo las veces de guía y tras él iniciamos la salida. Enseguida salió a colación el tema de “la colombiana”; por lo oído, una mujer melosa y de exuberantes caderas, lo cual hacía que se disputase el lugar más próximo al relator para no perder detalle. Subimos pegados al edificio de la ONCE y junto a la Iglesia de Salcedo, Mouco puso la primera variante al recorrido con giro para subir por senderos que discurrían por el costado izquierdo de la carretera que sube a la Brilat enlazando con esta en mitad de la subida. Atravesándola, nos dirigimos hacia la ya derruida “aldea afgana”. En tramos, Burguiños nos ofreció su buen hacer en subidas técnicas, pateamos algunos y nos hundimos sin remisión en otros. Cuando uno no echaba el pie al suelo se lo hacía echar el de delante, por lo que, la palabra manida durante la mañana fue “anticipación”.
Cierto que, el que más sufrió durante la subida fue T. Mouco pero, como veremos, mientras penaba en silencio, iba escribiendo su venganza. Llegados al Lago, tras una hora y media, aproximadamente, nos invita a que le sigamos en la bajada. Lo cierto es que cuando el que más y el que menos se las prometía felices, nos pegó unos meneos por pistas y caminos que nos hizo poner el pie en el suelo a todos y, mientras se reía viéndonos patear, algunos se cagaban en todo lo habido y por haber desgastando las calas contra el suelo. “Toñito, mañán non vas a traballar”, le increpaban. De nuevo, a la altura de la aldea afgana, Burguiños toma las de Villadiego y pone proa hacia Marín mientras nosotros descendemos hacia la gasolinera de Mollabao tras otra hora y media. Con las piernas “arregladas” completamos recorrido en el autolavado del albergue de peregrinos tras más de tres horas.

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http://youtu.be/3tgJzKEmHVU   http://youtu.be/t1kETdtdDQs
http://youtu.be/PBDAS5GOk14  http://youtu.be/S-ihwtpykf4
http://youtu.be/3w9Ygir1rsI        http://youtu.be/07GdkeNomEI
http://youtu.be/PtA_QaQfj_U      http://youtu.be/YCZR1YeSde4
http://youtu.be/-R8YD7SmTRg   http://youtu.be/s0p1he3TPEI
http://youtu.be/Hvfz1HDoSaM    http://youtu.be/o65KPOBtXJ0
http://youtu.be/-fCuIGydPT0       http://youtu.be/NyQNoC772uU
http://youtu.be/cB_yY8gwD4o    http://youtu.be/nOH5eZ9MQHw
http://youtu.be/UQjbkW6BCdw  http://youtu.be/HieKzyxwlhE
http://youtu.be/4qP9b7LQHU4   http://youtu.be/4qP9b7LQHU4