lunes, 24 de diciembre de 2012

Domingo, 23. Grupo 9.00


Después de dos semanas sin vernos las caras debido al mal tiempo nos reencontramos de nuevo cerca de 20 compañeros, los de costumbre, excepto un joven, al cual nadie conocía.
Iniciamos la subida a Poio a ritmo de calentamiento y bajamos a la Seara sorprendentemente tranquilos, parecía como que no había muchos voluntarios que quisieran encarar el largo hacia Combarro debido al fuerte viento de Sur.

Enseguida Rocha y Javi toman el control del grupo, de cuando en vez, Pablo G+B también mete algún relevo. Los demás, protegidos del viento, agradecíamos al citado elemento su presencia ya que nos suponía un menor esfuerzo ir a rueda.
Así las cosas llegamos al repecho después de pasar Combarro, en el que el joven ciclista, antes citado, se pone delante y con toda la “tranca” metida aprieta con ganas. Se empiezan a oír las primeras voces de reprobación. Continuando con la misma dinámica llegamos a la subida de Raxó; Javi y Rocha se apartan de la cabeza y dejan que alguno de los que iban detrás marquen el ritmo de la subida y de nuevo se repite la misma historia. El joven al ver semejante parón y, evidentemente, al no conocer la dinámica que lleva este grupo, pensaría, digo yo: “Estos ya no pueden más”; atrancado de nuevo pasa a la cabeza del pelotón y siquiera antes de empezar le “cae” de todo. Las voces de ultratumba hacen su presencia. “Ves detrás e agora poste a tirar” “Vaite cos das nove e media”, “sempre ha de vir alguén que che dea polo …”, etc. Total, el joven, desiste de lo que, quizás trataba de hacer y deja que el ritmo siga siendo el que hasta el momento era.

Subida a Sanxenxo con el grupo al completo y en el llano, Rocha y Javi se emplean, ahora con el viento a favor, para ganar algo de tiempo.
El grupo encara, unido, el istmo de A Lanzada, Javi y Rocha siguen en cabeza, el primero se mete hacia el medio de la carretera para dejar sitio a la gente que comienza  a montar el abanico de izquierda a derecha. Así abrigados alcanzamos a Toñito, al cual le grito que se meta a rueda; me contesta que va a lo suyo y no nos hace mucho caso.

Al llegar a la rotonda de O Grove, de nuevo, los del grupo de las 9.0 no nos ponemos de acuerdo. Dan la vuelta Pablo, Miguel G5 (me dice que acompaña a Pablo)  Alberto (sin avisar) y Paco  (lo supongo porque no lo vi). Inmediatamente aviso a Isidro para darle cuenta de la cosa (antes me había dicho que tenía que estar pronto en la city) y también se vuelve.

En tanto, Fernando, Tito y yo paramos al final del puente de A Toxa, aliviamos y decidimos que hacer. El primero propone que nos vayamos a San Vicente; tomamos el camino y poco después de pasar el puerto de O Grove ya nos alcanza el grupo.
En el cruce de Balea, otra vez la descoordinación; Fernando toma para Balea, le pego unas voces a Tito que iba algo delante; no me oye o no me quiere oír y sigue con los de las 9+1, al igual que Álvaro.

Entretanto Fernando y yo discrepamos de la táctica seguir; el sostiene que vayamos despacio hasta que lleguen los demás y hacer que nos lleven contra el viento; yo opino que mejor sería hacer camino y subir Paxariñas tranquilos (calculaba que este sería el lugar dónde nos pillarían).
Con los “bandazos” acojonantes que el viento provocaba en mi rueda delantera hacemos camino relevando aquí y allá. Subimos Paxariñas y Sanxenxo. En el alto llega el grupo y a su rueda llegamos a Poio con Tito visiblemente cansado. Parece ser que en A Lanzada, Javier Mirón retó a Javi, diciéndole que no tenía ()() de dejarlo en esa zona;  Javi, recogía el “guante” y Mirón le hacía “la peineta” con el dedo índice de su mano. El tema fue que  aquel salió de la curva de San Vicente a toda mecha, en tanto que Rocha y Mirón –viejos “zorros” iban a cm de su rueda - El viento  en contra, fortísimo hizo que no fuera posible dejarlos, pero cortó el grupo. Hubo reagrupamiento con ardua tarea de Javi para meter a Tito dentro del pelotón, ayudado más tarde por Eduardo. Álvaro rechazó los empujones y vino a su ritmo.

En Poio se negocia la subida y juntos, de nuevo, llegamos arriba y de aquí a la Alameda.

No hay comentarios:

Publicar un comentario